Club De Escritura Aike

Cuando colocaste el regalo encima del aparador  ya sabía que esa noche amarías a otro.  Lo sé por que leí vuestra nota  por que me mirabas de manera indulgente  por que al besarme en la mejilla me sentí un niño  y cuando colocaste mi regalo, nuestra foto ampliada de cuando nos conocimos,  vi el feto acartonado del que jamás nació nada y te odié y te amé odiándote como nunca  y me escondí y grabé el vídeo en el que me suicidé.      (Intevención)  Cuando colocaste el regalo encima del aparador  vi el feto acartonado del que jamás nació nada.

Heracles visitó a Atlas en uno de sus Doce Trabajos para recoger las manzanas de oro de las Hespérides. Atlas le dice que puede conseguir las manzanas de oro, pero que tiene que ser él quien vaya a por ellas, así que debe sostener mientras tanto el arco del firmamento. Heracles acepta, Atlas va a por las manzanas y a la vuelta le dice a Heracles que siga sosteniendo el firmamento que ya él entrega las manzanas y que luego si eso vuelve a sostener el arco del firmamento. Heracles acepta y antes de que Atlas se fuera le pide un favor, que Atlas cogiera el firmamento mientras se colocaba un almohadón en los hombros, para estar más cómodo. Atlas acepta, carga con el firmamamento y en ese momento Heracles huye con las manzanas y hasta luego Lucas.

Este viernes 9 de abril a las 19:00 horas, de manera telemática, tenemos otra sesión del Taller/Club de escritura creativa AIKE, del que puedes formar parte, porque escribir es construir mundos psibles e imposibles y si leer es dejarse llevar, escribir es crear el mundo. Atrévete a probar si no escribes y te gustaría y atrévete a entrar si escribes. Las puertas están abiertas. Para participar envía un correo a aikemarmenor@gmail.com o un WhatsApp al 644650900. Te enviaremos un enlace para que puedas asistir a la reunión vía ZOOM y entrarás en un grupo de WhatsApp en el que te mantendrás informado. Para la reunión del viernes 9 de abril hemos propuesto traer los siguientes ejercicios. Atrévete a hacerlos, en el los vídeos se explica. Propuesta de Félix Crespo: Epigrama al estilo de Ernesto Cardenal https://youtu.be/l4O7iOc4m44 Propuesta de José Ramón Pastor: Caligrama, poema visual o poema objeto, relacionado con la mitología universal. https://youtu.be/EgOTjwKf8G0 Para abril

Cuando abrí los ojos, cuando nací fui lanzada como un proyectil. El suelo se abrió bajo mis pies y me quedé colgando en el vacío. Estaba sola y sentí que nadie me esperaba. No es fácil asumir que eres un piojo en un bosque animado. Pero me levanté. A base de golpes y más golpes conseguí dar mis primeros pasos. No me llevaron muy lejos. Aunque siempre traté de huir de EL, no lo conseguí. Mis piernas tropezaban en el palo de la escoba y mi cabeza acababa estampada contra la puerta.   EL me persigue. Me agarra. Me encuentra. Quiero esconderme en el armario empotrado. Hasta que una mano rebusca en la oscuridad y … Me he meado. Siento la humedad, pero no puedo moverme. La oscuridad está en todas partes. Pienso que se ha ido, pero no puedo salir.   Estábamos comiendo, uno en frente del otro. La carne se salía del plato. Un corte y un hilo de sangre escapó del nervio. El tenedor aferró el trozo mientras el cuchillo lo diseccionaba. La fuerza hizo que las gotas de sangre manchasen la mesa.  Ot

Yo recuerdo constantemente que te quise de verdad tú no puedes olvidarlo y lo intentas, yo quiero olvidarte y que tú no me olvides, así que te digo adiós con la mano y te regalo una sonrisa. ----------------------------------------------------------------- Me condenaste al infierno que soy yo compré billete de primera clase a destino muero cada vez que el sol saluda lloro todas las noches con la luna con la que brindo tu ausencia. ----------------------------------------------------------------------- Odio el odio con el que me odias amo tu amor de desidia quiero querer como te quise olvido olvidarte como recuerdo que fuiste. ----------------------------------------------- Quise poner una bomba en el corazón del mundo para hacer estallar esta locura de sinrazón, Pero al final planté un jardín lleno de flores por poeta o por cobarde. Nerón Vital Sorní.

Marcos se ha levantado a las 5. Se ha tomado un café solo y ha bajado a la calle donde, junto a la parada de autobús de la esquina, su compañero Miguel lo recoge todas las mañanas para ir a trabajar. Después de pasar toda la jornada recogiendo hojas y recortando los setos de la urbanización Villa Marín vuelve de nuevo a su piso. Pero antes le pide a su colega que pare para comprar algo para la cena. Antes de acostarse ve un rato la tele tumbado en su sofá. Marcos ha quedado a las 10 con su abogado. Se toma un café y con las prisas vuelca la cafetera manchando toda la encimera. Pero no le preocupa. Ya lo recogerá María, la chica de la limpieza. Sale del garaje en su Audi y se encuentra con Miguel, el jardinero, a quien le dice que hay un gato muerto junto a la piscina. Los papeles del divorcio están ya preparados. La custodia de sus dos hijos será compartida y tendrá que abandonar la casa. Marcos no ha podido dormir. Se siente inútil. No le gusta que María, su mujer, haya te

  La decisión fue difícil y fácil en sí misma, en ese momento tuve claro que era lo mejor. El cuenco se llenó de vida a la edad de 27 años, no podía creerlo, por momentos me llené de fuerza y seguridad, por momentos sentí el abismo, no aceptaría ese reto, pensé, y lo vacié. Su origen no era exacto, generó mil dudas, aunque algunas, tras las diez lunas se resolverían, el curso de mi vida no iría por ese camino. Solamente pasó un año, cuando volvió a suceder, el origen sí estaba claro, pero aún no me sentí preparada y de nuevo lo vacié. En este caso, pensé que podía ser viable por más tiempo, pero volví a vaciarlo. Viví ese dilema de ser o no ser, me decanté por desprenderme, me hizo alcanzar el control nuevamente de la situación, pero alguna consecuencia tendría esta experiencia. Más tarde, sentí que también quedó su hueco, su huella, su muesca. La primera vez que logró la vida continuar en mi cuenco, que consiguió abrirse a la vida un ser dentro de él, fui plena, a los 3

Casi sin darme cuenta me convertí en un adulto, sin grandes saltos, ni crisis, ni transformaciones, bueno, "adulto"... al menos ese es mi aspecto físico, pelo canoso, marcadas arrugas de expresión y esa mirada que se torna en gris y abatida. No sé como ocurrió esto, ni por supuesto, cuando. Estaría yo ocupado en naderías, trabajando o en alguna responsabilidad vacua. Siempre he tenido la firme sospecha que todo el mundo, incluido yo, claro está, es inútil, pobres bobos que no sabrían valerse por si mismos sin indicaciones u órdenes externas. -"Estudia esto", "trabaja en aquello", "compra lo de más allá", "piensa esto y solo esto". Claro, así es fácil vivir, con indicaciones constantes. Como pasarse un videojuego en el nivel más sencillo. Es como si el mundo estuviera hecho para la gente básica, para los que andamos justitos, para los que no damos problemas y solo agachamos la cabeza y seguimos avanzando hacia el matadero, con ojos grise

-Mario, termina la partida ya, que nos tenemos que ir, que es el cumple de tu primo.  Diez años   ya, madre mía, como pasa el tiempo. -Paco, coge el teléfono que tengo las manos mojadas. -Es tu hermana. -Bueno, pues cógelo, que yo no puedo. -Tú madre, que ha ido a la Rosa Encarna y la ha mandado para abajo. Esta no atranca, en  cuanto tienes algo te manda al Morales. Así que mi padre no quiere ir nunca. -La hora que es y no dicen nada. Voy a llamar. No, me espero. Bueno… Tú acuéstate si quieres, yo no puedo dormir. -No tranquila, me espero. -Acaban de mandar un wasap, que la mandan a la Arrixaca. Han visto algo raro y la mandan para allá. Esto no me gusta un pelo. Cáncer, que palabra maldita. Cáncer, cáncer, cáncer…. -¿Qué le han dicho? -Nada, que tienen que hacerle más pruebas, pero que la tienen que operar y cuando la abran sabrán realmente lo que se ha extendido. Pronto será su cumpleaños, sesenta y cinco años, recién jubilada. Habrá que celebrarlo antes de la operación. Todos junto

                                          Entré en el trastero con la caja de juguetes entre los brazos, pesaba hasta ahogarme. Abrí la puerta con esfuerzo y apoyé la caja sobre una silla. Destapé el baúl que los acogería como última morada. Fui sacándolos uno a uno con nostalgia, con casi todos ellos había pasado buenos momentos, hasta que salió la muñeca con las cuencas de los ojos vacías. Un temblor incontrolable se apoderó de mi cuerpo. Aquella muñeca había sido mi mayor deseo. Cuando llegaba a casa de mis tíos, los ojos se me iban invariablemente al macetero que, en vez de maceta, le servía de asiento. Me encantaba el azul de sus ojos enmarcados por las pestañas, los mofletes, su boca a lo Marilyn Monroe, la seda de su vestido acorde con los ojos. Mi tía me la prestaba un ratito, encargándose encarecidamente de que no rompiera su cara de porcelana. Yo hablaba con la muñeca, le contaba todo lo que me había pasado en el colegio, la besaba, le movía las manos, acari

Por supermán dos nos t iramos cristales rotos sobre el hombr o y el ojo de mi hermano se rajó.   Supermán dos, 1980, de camino al cine de verano andando por entre montañas de escombros. Una botella rota en la carretera. Nos pusimos cuatro adolescentes, los hermanos vizcaínos, mi hermano y yo , a retirar los cristales para evitar que se pincharan las ruedas de cualquier coche y fue el ojo de mi hermano el que se pinchó.   Pablo gritó, se masajeó el globo ocular izquierdo a través del párpado porque algo le había entrado y una cuchilla de cristal le rajó el ojo. El humor vítreo bañó como una lengua de pomada caliente la mejilla de mi hermano. Le abrimos el párpado y solo quedaba una pasa brillante roja.   Nerviosos lo arrastramos a la casa próxima de un vecino médico , que con las pinzas de quitar pelo s de la nariz le quitó los cristal es y el ojo pasa ya era mate . Olía a corcho.   Mi hermano y yo r egresamos a casa de mis abuelos y los hermanos vizcaínos fueron a ver