¡Cómo quema el café!

Ufff, ¡cómo quema el café! Le he dicho a la camarera que, con la leche caliente, pero está ardiendo; bueno, al menos me ha alegrado la vista cuando se alejaba ¡vaya culo tiene, y cómo lo mueve! Está buena con ganas. Me ha puesto una carita sonriente en el café con leche, no sé si de café o canela, espero que sea canela, que me gusta más ¿Me habrá querido insinuar algo, o se lo pone a todos los clientes?Joder, la tía está buena con avaricia. Espero que no tarde, ¿cómo era?, ¿Alma?, ¿Alba? No recuerdo... Bueno, imagino que me dirá su nombre al presentarse. Esto de ser la primera vez me pone nervioso. Llevo dos años sin mojar el churro, y al final le he hecho caso a Anselmo; es un cabrón con suerte, al final será a él a quien asciendan. Si es que tiene un palique... es capaz de venderte arena en el desierto para que no te falte.
Este servicio de putas por las mañanas no sabía ni que existía, no me hace mucha gracia. Nunca he ido de putas y no sé muy bien qué coño hago aquí, me cago en Anselmo, hay que ver cómo me ha liado. Dice que no son putas, que son señoras que se aburren, que lo hacen por vicio y de paso se llevan unos eurillos para sus cosas, ropa, perfumes y cosas así. Dice que algunas hasta están casadas y lo hacen cuando dejan los niños en el colegio. También dice que cuando te ven, si no les gustas no lo hacen contigo.
No me había fijado en ese salón del fondo. Vaya pedazo de pantalla, seguro que es para ver el fútbol. Qué bien tiene distribuidas las mesas, y esa barra corrida con taburetes es la hostia, será para los que vienen solos y no tienen con quien sentarse, como yo. Estoy harto de verlo en el bar de abajo de casa, es una mierda, pequeño, lleno de humo y borrachos que no te dejan disfrutar del partido. Bueno, y digo yo que si cobran 150€ algo putas sí que son, si no, lo harían gratis. Joder, como tarde mucho me voy. Sí es que no sé qué hago aquí. Bueno, al menos he encontrado un sitio mejor para ver el fútbol. ¿Será esa que acaba de entrar? No sé, me ha mirado, pero se ha sentado en la barra y ha pedido un Martini, ¡a estas horas!
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¡Vaya! ¿Será ese con cara de lelo? Seguramente. Lleva puesto lo que acordamos, pantalón negro y jersey rojo. Bueno, parece inofensivo, aunque nunca te puedes fiar. Voy a echarle una foto disimuladamente y se la envío a la Cari, por si acaso. Vamos Lourdes, 150€ a la "buchaca", no está mal del todo. ¡A por él!
- ¡Hola! Soy Alma, y tu debes ser Ricardo. Encantada de conocerte.
- Ehhh, estooo...Creo que se equivoca señora, ejem, lo siento, he de irme que llego tarde. Adiós





María J Andreu