Correo electrónico para Elisa.

Querida Elisa,
Tengo una conversación pendiente contigo. La he imaginado millones de veces, pero no me atrevo a verbalizar esto en voz alta, así que he creído mejor hacerlo por escrito, que aún es más romántico.
Espero no abrumarte al expresar mis sentimientos, intentaré ser comedido, aunque lo que me pide el cuerpo es ser intenso y apasionado.
Hace ya casi 15 años que coincidimos casualmente en la tienda de tu primo. Al inicio pensé que eras una niña sabionda, pero enseguida me demostraste que en realidad lo que hacías era cuidar de Carlitos como una hermana mayor. Esa capacidad tuya para cuidar de los demás y saber dar cariño, paz y alegría sin que te des cuenta siquiera, me ha ido enamorando.
Esta amistad ya duele. Creo que por tu parte también existen sentimientos hacia mí, que notas esta conexión especial que tenemos y que hace que juntos se nos pasen las horas como minutos y no paremos de reír y de soñar.
Cuando estoy a tu lado me apetece abrazarte, besarte, fusionarme contigo. Tus ojos me hacen perder la objetividad y me vuelven sensible e indefenso. Además siento que junto a ti soy mejor persona, que me aportas claridad y color, me haces crecer en todos los aspectos de mi vida. Me encanta tu forma de ver las cosas, de relativizar los problemas, o como tu dices, "las situaciones interesantes". Para mí eres la persona más especial que me he encontrado nunca.
No he dado este paso antes porque, desde que me di cuenta de que era más que amistad, hemos tenido parejas uno u otro. Pero ya no puedo más, no quiero perder un momento más. Elisa, quiero vivir una historia de amor contigo. Te deseo. Ansío el roce de tu piel con la mía, comer a besos todo tu cuerpo y que vibremos juntos al sentirnos; verte despertar a mi lado tras noches llenas de amor y frenesí.
Me gustaría invitarte esta noche a cenar en mi casa y empezar a hacer realidad este sueño que me desborda.
Tu enamorado.
Tomás.



(Cristina Ramírez)